Tardes de ironía

#bingwright

La ironía vespertina 
atrona con su eco,
despierta del letargo 
a las abotargadas injusticias,
esas que escondieron la cabeza 
ante la incontrolada
avalancha de prejuicios, 
olvidando 
el sentido de su existencia.

La comodidad 
juega con nuestros miedos 
inoculando su veneno entre ellos .
Nuestra valentía, sentido común 
caen aturdidos.

Despertamos 
con un solar frente a nuestros sueños, 
con las fuerzas mermadas, 
con los planes caducados, 
con las ilusiones machacadas 
por sus inventadas realidades.

Nos transforman, manipulan, 
nos hacen dependientes
y cuando la carrera se  desmanda 
irremediable hacia un abismo
sueltan el cordel gritando 
que la culpa es nuestra. 

Esa ironía vespertina 
nos despierta con su carcajada 
descubrimos todas las mentiras 
que han mantenido presas 
a las injusticias que nos impulsan.

Nos queda tanto por despertar, 
tanto por ajustar, hacer, 
luchar, recuperar, 
limpiar, recordar, 
tanto por reclamar.

Demos gracias a la ironía vespertina 
esa que despierta 
con el eco de su risa 
toda la mentira 
con la que hemos sido intoxicados.