Te quiero, le
dijo,
pero no como ese primer te
quiero,
que me hacía verte perfecta,
el que salía de mi deseo
reflejado en tus ojos,
tal cual,
sin sutilezas,
No es el te quiero
de mis torpes caricias
ni el de tus sonrisas,
No es el que leías en mis silencios,
ni el que sentía al escribir
tu nombre en todas las volutas
Te quiero, dijo,
de la misma manera
con otra intensidad.
Ahora
simplemente te veo
El deseo lo encuentro
al recorrer tu cuerpo
con la tranquilidad que da
conocer cada rincón
sorprendiéndome
al descubrir nuevos dobleces
No escribo tu nombre
ni me sorprenden tus ojos
Aunque si lo hace la estela
que dejas en mi cuerpo
porque lo reconozco
porque lo comparto
porque soy yo mismo
¿Te querré?, le
dijo,
No me aventuraré,
No lo prometeré
Quizá un día, sin más
aprenda de nuevo a verte
puede que me sorprenda
el sonido de tu te
quiero
No sé si te querré
ignoro si me querrás
Solo puedo decir que,
hoy por hoy
te quiero
sin intensidades
sin estrépitos
sin gritos
sin magnificencias
Te quiero
con la certeza que da
sentirse la única pieza del puzle
que puede pertenecer a tu hueco.
4 comentarios:
Este poema lo empecé el día de San Valentín pero lo dejé a medias... hoy me ha dado por terminarlo.
Ahí está un te quiero tan posible como ficticio.
Pues me alegra que lo terminaras porque te ha quedado guapísimo.
Leyéndolo, he rememorado el
Ahora te quiero,
como el mar quiere a su agua (...)
de Pedro Salinas.
besos
No se si ha sido mi talante de hoy o qué, pero me ha parecido de una ternura tan emotiva,tan entrañable,tan hermosa...
Tienes razón...se extrañaba este intercambio de palabras-letras.Y por aquí andamos intentado volver a...nuestro ser.
Muxus,muxus eta muxus.
Ana
Gracias Rain, la verdad que lo tenía en la cabeza rondando y había que acabarlo!!. Bss
Ana! qué gusto tenerte por aquí, yo sigo aún intentando volver, y cuesta mucho la verdad pero me encanta volver a verte por tus lugares. Muxus
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